Existen dos clases de personas: Las que se sienten tranquilas en su zona de confort, las que no tienen necesidad de moverse de su sitio de siempre, de alejarse de sus comodidades. Después estamos el resto. A los que nos mata la curiosidad y no podemos estar quietos en un mismo lugar, los que a todas horas tenemos la sed de viajar, esa que solo se sacia con sumar a tus experiencias otro rincón más. Para los que el pasaporte significa media vida.

Nosotros sin duda formamos parte de la gente aventurera y arriesgada! Y por eso mismo este año quisimos dar un giro a nuestras vidas y vivir durante un tiempo en otro país, con otra gente y con otras costumbres.

Manteneros al día de todos los sitios que visitamos nos encanta. No hay nada que nos guste más que poder explorar rincones nuevos y compartirlo con toda la gente posible para que se animen a practicar este gran vicio de conocer mundo. Y a los que por una razón u otra no pueden hacerlo, redactamos todas nuestras experiencias para que al menos puedan alimentarse de ellas y en su mente viajar por un instante a estos recónditos lugares.

Ahora bien, la pregunta del millón que muchos os estaréis haciendo: Y como lo habéis hecho?

Pues bien aquí os dejamos la receta por si alguno se anima a kangurear como nosotros.

RECETA :

Añade infinitas cucharadas de ilusión y combínalas con una taza de positividad. Mézclalo bien con valentía y rocíalo con un litro de curiosidad. Déjalo cocer a fuego lento, remuévelo suavemente con un poco de esfuerzo y constancia y finalmente añádele una pizca de dinero.

- Servir con hambre de explorar sin jamás saciarte y con ganas incontrolables de comerte el mundo -

jueves, 20 de abril de 2017

Pros and Cons of working in Australia as an immigrant



¿Te estas planteando venir a Australia?
Yo te cuento la realidad de este país, sin tapujos. Lo que a todos nos gustaría saber antes de venir y por lo que aun sabiéndolo nada cambiaría. Porque es una experiencia que tienes que hacer, que no pasara indiferente, que disfrutarás y que te aportara, pero que no todo será de color de rosa como lo pinta la mayoría. No olvides que emigrar al país que sea no es fácil por eso mismo no quiero que la gente se cree falsas ilusiones... aquí hay de todo como en todas partes y hay que venir preparados y concienciados referente al trabajo. Me explico.

Cuando pasa por tu cabeza emigrar, normalmente lo primero que hacemos todos es informarte al máximo de ese país, sobretodo leyendo las experiencias de gente que ya ha pasado por eso. Y está bien explicar todo lo bueno, pero eso no significa que no exista la parte menos buena.

En Australia cobras 40 dólares la hora, encuentras trabajo en un día, puedes dedicarte a tu profesión en poco tiempo... bla bla bla. Si, en algunos casos pasa, pero te aseguro que no es lo normal así que no se puede ir esperando besar el santo nada más pisar tierra.


CONTRAS:

Primero, aquí empieza a haber muchaaa competencia. Australia es país de backpakers cada vez más y todos buscan lo mismo que tú. De ese modo, cuando busques trabajo 1 : O tienes como en todos lados contactos o 2 : te va a tocar patearte la ciudad de arriba abajo, repartir CV y hacer más de una prueba sin cobrar. Eso es lo normal. Y quizá tardas una semana o quizá un mes, ahí ya entra factor suerte, la temporada y tus cualidades. Encontrarás, seguro, pero no te olvides que aquí realizarás el trabajo qué los de aquí no quieren hacer, es decir, la mano de obra barata de un país del primer mundo, ten siempre presente que al principio eres el inmigrante.

Segundo, sueldos altos sí, es verdad que aunque trabajemos en trabajos no calificados tipo camarero, limpieza, nanny, granja...cobras bien, pero eso significa de 20 a 25 dólares la hora normalmente. Fines de semana y festivos quizá más, pero hablamos de trabajos mucha veces duros y pesados. Y de 40 dólares la hora para arriba tienes que tener muchaaa suerte, meterte en una buena empresa de lo tuyo y eso a muy poca gente le ocurre nada más llegar, seamos realistas. Cuando emigras normalmente tu inglés no es fluido y el tipo de visado también te limita, estos dos factores sobretodo hacen que las grandes empresas no apuesten por ti. Con visa de estudiante solo puedes trabajar media jornada cosa que muchas empresas no quieren y si tienes la work and holidays solo puedes trabajar 6 meses en el mismo sitio y para muchas empresas es poco tiempo para saber si realmente vales o no y poderte hacer el ansiado sponsor que todo el mundo desea.

Tercero, los derechos de los trabajadores aquí se los pasan bastante por el forro…hablando claro. Si quieren despedirte lo van hacer sin darte apenas explicaciones. Saben que hay miles de estudiantes o de working holiday esperando a recibir encantados ese trabajo, de esa forma muchas veces se aprovechan. Aunque no en todos lados! Hay de todo recordar.

Con todo esto no pretendo desanimar a nadie sino acercarles un poco más a la realidad y hacer pisar el mundo con los pies. Yo estoy encantada de estar aquí, volvería a repetir mil y una vez esta experiencia pero hubiera agradecido que alguien me hubiera explicado esto para venir más concienciada.

Tengo que remarcar que como siempre he contado en mi blog, mi pareja y yo somos el ejemplo claro de que dependen muchos factores para conseguir un trabajo en el que estés a gusto. Yo casi vine con trabajo de nanny desde España, trabajando menos horas que allí y cobrando más (aunque no es a lo que aspiro para el resto de mi vida estaba muy bien para ser recién llegada), en mi caso pues me costó bastante poco. David en cambio tuvo que recorrerse toda la ciudad, intentar agradar, hacer pruebas de algunas horas sin cobrar y conformarse primeramente con un trabajo de camarero en el que solo le daban de 8-10 horas a la semana y en el que incluso a veces le decían que no había faena, que se fuera al parque de enfrente a esperar y que volviera a la hora... Lamentable. Después logró encontrar de cleaner, haciendo bastantes horas eso sí pero teniéndose que hacer autónomo y además como bien sabréis aguantar un trabajo muy duro que te deja realmente agotado y en el que encima vas a contrarreloj todo el día.

Vuelvo pues a lo de siempre, depende la persona, la suerte, etc, te toca vivir una experiencia u otra. Anyway! Aun así, merece la pena. Porque yo he empezado con lo "malo", lo que nadie suele hacer, pero hay mucho de bueno, lo que sí explica siempre la gente y por lo que tienes que hacer las maletas y venir.


PROS

Primero, cuando encuentras un trabajo, no importa que sea no calificado, empiezas a cobrar dinero y ahorras muy rápido. Aquí normalmente cobras a la semana y eso te permite poder disfrutar tus días libres de la mejor manera.

Respecto a los sueldos, recapacita, de 20 a 25 dólares la hora que es lo normal ya es mucho. Posiblemente estés cobrando como un ingeniero o un médico de tu país y eso nada más llegar, si, siendo inmigrante, si después decides quedarte y con el tiempo optas a la residencia ya ni te cuento que dineral puedes hacer.

Encima, comparado a España los precios de casi todas las cosas son igual, pero con la diferencia que aquí ganando el doble.

Segundo, aunque los derechos del trabajador sean por un lado nefastos eso hace que también puedas permitirte el lujo de cambiar de faena cada vez que quieras y encontrar otra relativamente rápido, también puedes decidir no venir tal día porque quieres irte fuera o incluso no trabajar una semana entera para poderte ir de vacaciones, o salir dos horas antes porque quieres irte de fin de semana, de concierto, o de lo que sea. Es flexible para ambas partes cosa que también te beneficia para depende qué.

Tercero, calidad de vida. Aquí al ganar bien puedes permitirte ciertos caprichos en poco tiempo, en mi caso un móvil nuevo, un coche de segunda mano, una cámara tipo GoPro, fines de semana sin parar, vacaciones en Navidades de 15 días por Australia y dinero ahorrado para viajar ahora mínimo 3 meses. A todo eso sumándole haber podido pagarnos el curso de David, la visa, el seguro médico y aun así tener ahorros. (Gasto cero por venir).

Así que si nos preguntáis a nosotros, ambos repetiríamos sin dudarlo. Los pros compensan y mucho, para unos más que para otros, pero si algo tenemos claro es que esta experiencia hay que vivirla mínimo una vez en la vida, dure más o menos. Porque todo lo que he comentado hoy aquí es referente al trabajo, pero esta aventura va más allá; te aporta otras cosas increíbles como mejorar tu inglés, explorar lugares que jamás imaginaste, conocer gente nueva de otros lugares del mundo y sobretodo, te hace encontrarte a ti mismo, saber quién eres y hasta dónde puedes llegar. Simplemente te hace revivir.


No olvides:
Emigrar es complicado, pero maravilloso a la vez!







Leer más...

jueves, 13 de abril de 2017

Emundi Market and Noosa



Vivir en Brisbane tiene una ventaja muy grande y es que tiene lugares increíbles que visitar a una o dos horas de camino.
Esta vez, David y yo queríamos volver a vivir un fin de semana igual de intenso como el que vivimos en Byron Bay justo al poco tiempo de llegar a Australia. Elegimos Noosa y Emundi Market para desconectar de la rutina y disfrutar juntos esta vez, de otro bonito fin de semana.


Preparamos nuestro coche con toda la munición posible (nevera cargada de comida, bebida fresca y nuestro set de camping) y salimos bien temprano hacia Sunshine Coast.
A una hora y media de camino llegamos al pueblo de Emundi, donde los sábados por la mañana realizan un mercado al aire libre muy grande, unos 600 puestos de venta, repleto de alimentos frescos y ecológicos, productos de artesanía, ropa hippie, joyas hechas a mano, puestos de comida rápida, rincones de música en vivo, etc…  


Este mercado, al igual que otros mercados Emundi creados posteriormente a éste alrededor de Australia, son unos de los mayores mercados de arte y artesanía del país. Éstos, se centran en  productos hechos a mano, con el espíritu de “hacerlo, se hornea, hacerlo crecer, coserlo”.  






Estuvimos un par de horas recorriendo los diferentes pasillos que formaban el market y disfrutando de un buen ambiente. El pueblo también es digno de ver, no es muy grande pero sus calles son sacadas como del mismo oeste, parece ambientado en años atrás aunque simplemente es el estilo de ese bonito lugar.



 El calor empezó a apretar mucho, así que después de caminar bastante, volvimos a nuestro coche para dirigirnos a Noosa. Allí ya habíamos estado en Diciembre para el cumpleaños de David, pero no nos hizo muy buen tiempo y queríamos saborearlo de nuevo esta vez con sol radiante.

De Emundi Market hacia Noosa hay aproximadamente 30 minutos más en coche. Nosotros llegamos a media mañana y sin dudarlo fuimos directos a la playa a darnos un buen baño.
En Noosa Heads , en la parte izquierda de Main beach (la playa principal) se encuentra una pequeña bahía con una de las mejores playas que hemos visto hasta ahora aquí. Desde Dog beach (si, es para perros pero realmente es preciosa) hasta Sandy Cove, es un entradero de la playa que es muy relajante. Además había cientos de peces y una vez más David pudo disfrutar haciendo snorkel (yo preferí estar en mi flotador de donut y verlos desde la superficie). Y bien, como su nombre indica, Sandy Cove quedó como uno de mis rincones preferidos.
Comimos allí nuestro tupper de ensalada de pasta y después nos dimos una increíble ducha que acabo de dejarnos en las puertas del paraíso.





De allí fuimos a pasear por Hastings Street, la calle más famosa para salir de restaurante o de compras y después recorrimos toda la avenida Noosa Parade para observar los ríos que se entrelazan en el pueblo, con las casas de millonarios en medio y su yate enfrente… en fin solo apto para gente de mente fuerte.


Caída la noche, paseamos por la zona de Noosa Ville, otra zona increíble con un puerto pequeño pero muy cuco, donde las familias y amigos se reunían para hacer su picnic-cena. Allí un fish and chips nos sentó como agua bendita.


Después de ese magnífico día, nuestras energías ya flaqueaban así que fuimos al camping Noosa Sea Scouts que habíamos reservado esa misma tarde (perfecto calidad-precio) para pegarnos una buena ducha y descansar en nuestra tienda de campaña, esa que ya empezaba a ser media casa para nosotros.



Otro bonito día se presentaba ante nosotros, otra vez el sol relucía, así que nos preparamos nuestro desayuno, nos dimos otra larga ducha y nos fuimos a hacer un poco de tracking por el Parque Nacional.  Allí hay diferentes rutas, nosotros escogimos la que iba rodeando toda la playa y llegaba hasta Hell’s Gate. 


Realmente es una buena caminata, pero el paisaje te deja tan embobada que vale mucho la pena. Pasas por diferentes puntos para hacer fotos espectaculares, pero uno de ellos son los que realmente disfrutamos mucho. Las Fairy Pools son como piscinas artificiales que se han formado entre las rocas por la fuerza del mar, y cuando estas metido allí quieres que el tiempo se pare. (Avisar que hay algún cangrejito que  pellizca los dedos de los pies, así que si nadas y no apoyas te evitaras los sustos que nos llevamos nosotros).



Y bien, después de esa caminata y ese baño nuestros estómagos rugían demasiado fuerte así que fuimos hacia Noosa Ville otra vez, a disfrutar del sitio esta vez de día. Allí, nos comimos un buen pollo asado comprado del Coles y nos tomamos nuestro café con vistas al rio. Que placer!



Para finalizar nuestro perfecto fin de semana, fuimos bajando tranquilamente hacia Brisbane pero no sin antes pasar por Sunshine Coast, pasear por su costa y visitar su centro comercial Sunshine Plaza, al estilo Venecia (pasa el rio por medio y es muy peculiar).


Ahora sí, concluíamos esta escapada con un buen sabor de boca, con energías renovadas, con mucho más amor entre nosotros y sin duda con un 10 de puntuación.
Leer más...